sábado, 30 de mayo de 2009
ANTE TODO FUNCIONAL
Como si de zumo de naranja natural se tratara, exprimo mi cerebro a ver si la creatividad escurre y deja escritas unas líneas ocurrentes, constructivas, sugerentes o atractivas.
Borro directamente aquellas presentaciones de power point que últimamente mandan con hermosos y sabios consejos para la vida que si no reenvías a 20 persona se convertirán en maldición.
Sin embargo yo haría una entrada con consejos prácticos para la vida que comienza así:
He aprendido
- que en los estantes más altos de las tiendas hay cosas útiles e interesantes;
- que a la hora de comprar espárragos o productos enlatados hay que mirar no sólo la calidad y la cantidad, sino también si tiene abrefácil;
- que es mejor comprar tomates y verduras de poco en poco si no quieres que se vean cubiertas por el moho;
- que para hacer café sólo hay que enchufar la cafetera, echar agua, añadir café y dar al botón rojo;
- que en el extractor de humos pueden o pudieron habitar lagartijas y arañas que parecen gremlin pero son simples bichos cubiertos de grasa;
- que una pizza “casa tarradellas” es un gran invento, pues una sola puede valer para la cena, el desayuno, la comida y la merienda;
- que en los chinos y el eroski hay cosas buenas, bonitas y más baratas que en el ikea, y encima están al alcance de la mano;
- que el pegamento superglue en bote tradicional es lo peor porque se seca y se queda pegada la tapa; es mejor que tenga pincel;
- que se puede comer escuchando la radio y se puede vivir sin tele;
- que el origen de las tiendas de los chinos está en la tienda de la Candelas y en todos aquellos despachos de pan y leche que un día nacieron en los pueblos con el fin de disponer de todo al alcance de unos pocos.
Estos si que son consejos funcionales para la vida.
Y si no lo copias y se lo mandas a 20 personas antes de 20 minutos te van a crecer hasta el suelo los pelos de la nariz.
¡Cuánta razón tienes! Yo cambiaría lo de la pizza, porque las de Campofrío están mucho más buenas que las de Casa Tarradellas, y no es por hacer publicidad... por todo lo demás, ¡gracias por recordarlo!
ResponderEliminarHelenLove
Otro consejo...cuando pongas la lavadora sacala rapido y casi no tendrás que planxarla!! Y la pizza...del telepizza mas rapido jeje!!
ResponderEliminarQue duro es independizarse y no tener a tu madre haciendote la comida y planxandote eh?!
Un besazo enorme PILI!!
ROCIO
LOZ!!! Probaré la pizza de campofrío,a ver si es cierto lo que me dices. Ánimo con tus exámenes!
ResponderEliminarROCI!!! Maja! Eso me ha sucedido alguna vez y es lo más grande, es lo que más me gusta de lavar la ropa junto con el olor del suavizante mimosín. Espero que todo te vaya bien. Un besazo.
Yo he aprendido que el momento mas feliz del dia es sentarme en mi salón con un vaso de cristal con hielos, limon y coca cola, y un buen plato de patas fritas. Las Princesas del s.XXI somos asi.
ResponderEliminarSi esque... qué mayor que se me hace mi niña!!! yo ya sabía una cosa pero hoy la vida me la ha recordado, que no se pueden dejar patatas más de dos meses si no quieres que por tu cocina circule fauna diminuta.
ResponderEliminarNo creo que a ti se te pase la fecha mirando los productos durante 20 minutos y no quitando los envases jeje. Besitosss
Ichi! Te invito a realizar eso mismo en mi terraza en primavera-verano al atardecer... DE LUJO!!!
ResponderEliminarBeis! Ayer mismo me dio por mirar las patatas que ya llevan 15 días y si, las miré gracias a tu experiencia sabia. Eso si, hoy las zanahorias estaban marronuzas y arrugás como si tuvieran 120 años...
Y la pizza caducada... y el yogur con un habitante... Pero... ¡¡todo buenísimo en esa casa!!
ResponderEliminarSaaan! Pero en esta casa todavía no has probado la copa danone con moho extra, esa que tanto te gusta... Ya preguntaré a Elena cómo se hace... Loz, ¿Cómo se hace?
ResponderEliminar¡Que guarras que sois!
ResponderEliminarJeje, mi aportación: la única fecha de caducidad válida es "si camina, no se come" ;)
ResponderEliminarOye, y eso de que las pizzas te duren tanto... ¡Eres un poco pajarito, tú! ¿No? A mí si me sobran las cortezas para el gato, ya me sirve...